Este hotel ama el lujo sencillo, el de los materiales naturales, el del servicio atento y el de los pequeños grandes detalles de la vida. Con esta filosofía nació el hotel El Turcal de tan solo 11 habitaciones en las que se respira tranquilidad.
La espectacular altura del salón, mas de 10 metros, rematado por un lucernario que lo inunda todo de luz natural hace que conserve un cierto aire industrial y lo convierte en un edificio vibrante, mágico y cautivador.
Habitaciones "suspendidas" como cubos dentro del edificio a las que llegas por las escaleras de roble y pasarelas de cristal. 11 habitaciones, cada una diferente pero todas ellas concebidas a golpe de pasión y entusiasmo. Luz natural a raudales, techos abuhardillados, paredes de piedra, piezas de arte desperdigadas aquí y allá: pintura, fotografía, ilustración. Apuntes vintage y contemporáneos.
No te puedes perder nuestro patio interior, con su alberca de aire zen, perfecto para disfrutar de una copa o simplemente para reconciliarte con el mundo. Un gran jardín con piscina completan las instalaciones, todas de uso exclusivo para los alojados en el hotel.