Ubicada en un valle destaca por su galería y gruesos muros de piedra.
Espacios amplios con suelos de granito, paredes encaladas y enormes vigas de madera de castaño en la estructura dominan el espacio. El ambiente en el interior es sumamente cálido y acogedor. Existen agradables rincones para entregarse a la lectura en condiciones. La mayoría de las habitaciones ofrecen vistas al valle y todas tienen una pequeña zona de estar. las camas amplias y confortables están equipadas con colchones de látex, edredones de plumón y lencería de lino que valoran los viajeros más exquisitos. El edifico anexo, un antiguo lagar, ofrece dos habitaciones espaciosas, sala con forno-lareira y porche y acceso directo desde el jardín. Lugar codiciado por las familias. En la finca de 6000 metros cuadrados crecen algunos árboles importantes y variedad de plantas.